Muy interesante escuchar el pasado debate-enfrentamiento entre los periodistas Federico Arreola y Raymundo Riva Palacio en SDPNoticias. Y se espera que la próxima sesión, si se da, lo sea aún más. Sobre todo, por el historial que ha arrojado a ambos a un presente incierto. El primero, al parecer, producto de un esfuerzo permanente y el segundo, con antecedentes de alcurnia a la mexicana en el apellido y el oficio. Sin embargo, en el ejercicio de la profesión y el roce con el poder, se equilibran y cada cual ha encontrado un cauce.
Un inicio frio, lento, trocó en un final ríspido en el cual se dijeron palabras fuertes “No eres nada, chingaderita, mierdita, mentiroso, lambiscón, no existes,…”. No obstante, más allá de las acusaciones, el ninguneo y la superposición de las versiones, lo atractivo fue conocer detalles de la relación de ambos, los matices de ciertos eventos y la cercanía que los dos han tenido con políticos que van al menos desde Salinas de Gortari y Colosio hasta Fox y López Obrador.
Ambos personajes han sido expulsados del “paraíso” de los medios poderosos por conflictos de intereses y mezquindades internas. Federico del Milenio y Raymundo de El Universal. Habían colaborado en el primer diario y desde allí vienen sus problemas. De allí también la curiosidad por conocer las respectivas versiones de su mutua relación pero, sobre todo, de su relación con el poder, los políticos y el dinero, en el conflictivo contexto de fin y principio de siglos, y de cómo encara cada cual este presente incierto en relación a un aparente mejor pasado.
Arreola lo hace desde SDPNoticias, un medio en constante crecimiento y con un volumen de lectores amplio. Riva, desde EjeCentral, un portal de noticias que hasta ahora circula poco y no se ve que tenga posibilidades de mejorar su ruta a corto plazo. El uno ha expresado abiertamente sus relaciones políticas de Colosio a López Obrador, el otro quiere presentarse como un periodista puro, como si tal posibilidad existiera.
La importancia del periodista se mide en México no por su posible objetividad o distancia del poder sino por lo contrario, por sus roces y compromisos con los políticos más influyentes. Muchos hacen alarde incluso de tener “amistades”, contactos, acceso a información privilegiada de los entresijos de la red política, a los chismes, a las intimidades, a las cuentas, a las fiestas a las cuales son invitados por los altos burócratas de todo orden. Y lo exhiben en sus columnas como mérito, aun si no presentan pruebas de los datos “secretos” obtenidos en tales acercamientos. Es el caso de Carlos Loret de Mola –un típico columnista retorcido de intríngulis-, exhibido y descalificado por su propio padre, Rafael. Ese es el periodista que cuenta en México.
El periodista independiente difícilmente prospera. Una de las razones es que al no subsistir de los lectores, hasta el medio más crítico procura los contratos con el estado y los distintos gobiernos. Este simple hecho es una natural y permanente fuente de conflicto entre propietarios, periodistas y el poder. Otra razón, la interdependencia con las políticas e intereses de la empresa. Ejemplos abundan. El más lamentable durante los últimos años, el de José Gutiérrez Vivó, acosado y finalmente callado por el gobierno del ejecutivo actual.
El próximo debate entre Arreola Castillo y Riva Palacio promete más, porque después de los insultos y roces personales, entrará en los detalles del conflicto y a las consideraciones sobre el 2012; entre ellas, la orgía de las encuestas. Algunos desearían que surjan los puños en cualquier momento, mas se espera que prevalezcan los argumentos aun si candentes.
P.D. La última parte del encuentro:
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