Como todos los miércoles, Tercer Grado hizo acto de presencia en la televisión mexicana, y es que ya sólo hacen eso, poner sus caras a cuadro, reírse de cualquier tontería, tratar de caer bien, hacerse los chistosos y empeñarse a toda costa en que los televidentes creamos lo que nos están diciendo, disfrazando toda esa mala comedia de profesionalismo barato.
Y es que en verdad a estos señores “periodistas” ya no les encuentro la seriedad y alguna pisca de profesionalismo que alguna vez llegaron a tener. Cada miércoles es lo mismo, parece una plática de mercado en la que ni siquiera se tiene orden al hablar.
Cómo olvidar aquellas criticadas entrevistas a los candidatos a la presidencia de la República en las que lo único que había era gritos y faltas de respeto hacia el candidato que se encontraba ahí. Cuando estuvo EPN las cosas se veían más calmadas, claro, había intereses de por medio; con JVM no sabían ni por dónde ir y hacían chistes sin sentido; con Quadri se la vivieron aplastándolo y no dejaron de tacharlo de un pobre soñador ególatra que no veía su triste realidad; y qué podemos decir de la visita de AMLO, comenzaron por aclararle que no estaban en su contra y fue lo único que hicieron durante todo el programa, atacarlo y sacar riñas o dolores del pasado que por lo menos Ciro y Marín no han podido superar; ¡vaya profesionalismo!
Y parece que los mexicanos ya están cansados de esto pero siempre encienden su televisor a ver qué tontería dicen ahora o mínimo para saber qué ideas intentan hacerles creer a los mexicanos que los ven y no están tan informados o que siguen creyendo que son “los mejores periodistas del país”, cómo es posible que se juegue con la sociedad de esa manera.
Ayer hablaban de las encuestas, de las pésimas encuestas durante las campañas electorales y en lugar de dar una crítica razonable ante tantas irregularidades habidas en las elecciones, lo único que hicieron fue justificar la incongruencia de los altos porcentajes que todas las casas encuestadoras le atribuían a Enrique Peña Nieto y que estuvieron lejos de los obtenidos hasta ahora, hicieron chistes tontos como ya es costumbre y tomaron a juego un problema de gran magnitud como es la democracia de los mexicanos.
A Tercer Grado ya no le queda una pisca de credibilidad, pero el problema es que siguen tratando de inventar falsas historias que lamentablemente algunos se han de creer, en qué momento vamos a tener a personas responsables y profesionales frente al televisor, cuándo se llegará el momento de reemplazar a los viejos periodistas que tienen “más experiencia” por los jóvenes despiertos, que buscan cambiar el país, que quieren una mejor sociedad, que esperan un país informado y que difícilmente se dejan comprar, cuándo será el día en que tengamos medios de comunicación leales a la sociedad y no al cheque con que se les compra, cuándo, cuándo, no lo sé pero aunque lo veo difícil, espero no tarde mucho en llegar.
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