lunes, 15 de julio de 2013

Volkswagen quiere derrocar a Toyota

JORGE HERNÁNDEZ@jorgekravitzlun 15 jul 2013 07:18
  
Durante la crisis económica del 2008, hubo dos armadoras que se mantuvieron a flote durante aquella turbulencia económica que sufrió el mundo, una de ellas fue la indiscutible empresa sólida nipona Toyota, y la alemana Volkswagen, quien ésta última parecía una empresa que se encontraba en otra situación ajena a lo que sucedía en todo el mundo. Mientras las armadoras norteamericanas como General Motors y Chrysler sufrían una agónica situación para tratar de sobrevivir, la empresa fabricante del “vocho”, salía por el mundo con cartera llena para la compra de toda ganga automotriz en apuros.
VW llevó muy bien a la práctica aquel dicho que las crisis son un momento de oportunidad, tan oportuna fueron sus compras que parecía que se engolosinaba ante tanta ganga empresarial, al grado que aquellas firmas automotrices en apuros, llegaron a ofrecer atractivas ofertas de venta a la firma alemana. Gracias a la crisis mundial, hoy día VW goza de las marcas como Bentley, Bugati, Ducati, Lamborgini, MAN, Porsche, Scania, SEAT y Skoda. Todas ellas herederas de un gran prestigio.
Durante aquella recesión mundial del 2008, como bien sabemos, la totalidad de la industria mundial estaba pensando y lidiando con estrategias y venta de sus activos, para tratar de salir de la crisis en la que los habían metido las burbujas financieras al momento en que estallara con el anuncio de la quiebra del banco Lehman Brothers. En ese mismo espacio de tiempo, Volkswagen anunciaba al resto del mundo su estrategia de consolidarse como la Número 1 a nivel mundial, para posicionarse muy por encima de la japonesa Toyota y de la hegemónica pero casi desmantelada en aquella crisis General Motors Company. Todo parece que su anuncio en plena turbulencia no hizo eco, hoy vuelve VW a anunciar sus ambiciosos planes para conquistar la corona mundial que sigue manteniendo Toyota muy a pesar de haberla perdido en el 2011 ante GM por su recesión interna a causa de los desastres naturales en Japón.
Si bien la meta de VW es ambiciosa para cumplirla en el 2018, no así la estrategia que emprenderá para llegar a su meta. Para Toyota hace medio siglo se fijó la meta de convertirse en la Número 1 a nivel mundial, tuvieron que pasar años para conseguirlo, y así como la armadora alemana gracias a una crisis se catapultó en una mejor posición global, la armadora japonesa también se ha aprovechado de momentos de crisis de GM quien fuera la Numero 1 por más de ocho décadas a nivel mundial.
La diferencia entre Toyota y Volkswagen de pretender ser las número 1 mundialmente, es que para la armadora japonesa desarrolló todo un sistema de manufactura integral conocido como el Toyota Production System, que gracias a una ardua tarea de investigación, desarrollo e implantación de sus creadores Taiichi Ohno y Shigeo Shingo, Toyota es más que un referente automotriz, es un referente de excelencia organizacional y de suprema Calidad, muy a pesar de sus más recientes crisis por los recalls. Por otro lado Volkswagen anuncia una inversión de 68,500 millones de dólares para modernizar sus plantas y poder –según ellos- vender por lo menos un millón más de autos que el líder mundial actual.
Es aplaudible la ambición de VW, sin embargo que pasará si Alemania se atasca con la Eurocrisis y comienza una fuerte desaceleración económica. El crecimiento y consolidación del fabricante alemán de autos, mucho ha tenido que ver con las coyunturas económicas que Alemania ha sabido aprovechar, no es casualidad la fortaleza económica que han demostrado los alemanes ante el resto de Europa y el mundo, todo ha sido fruto de aprovechar los momentos de crisis, y Alemania ha sido un alumno muy avanzado en este tema, pero la pregunta sigue estando en el aire, ¿qué pasará si para Alemania las crisis como España, Portugal, Grecia y el más reciente Chipre, resultan ser más complicados sus rescates?, ¿podrá Alemania sostener una recesión de cuatro países por más de cuatro años consecutivos?. El riesgo es muy alto, y por lo tanto, es muy ambiciosa la meta de VW de intentar ser la Número 1 a nivel mundial basasda en una inversión para modernizar sus activos, cuando su país sostiene la irresponsabilidad financiera de cuatro naciones europeas.
El Apunte
Tiempo al tiempo, ya veremos si de aquí al 2018 las coyunturas económicas globales le favorecen a la firma alemana de autos Volkswagen, por que fijarse una meta como el Número 1 en ventas, cualquier con ingenio lo lograría, pero sostenerse por años, no lo creo.

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